El alivio del desánimo
Repetimos sin querer estados emocionales antiguos, y todo se desencadena a partir de una sensación, a partir de un pensamiento. Son los pensamientos grises. Pensamientos a los que deberíamos ser capaces de renunciar o neutralizar y transformarlos, dejando volar la imaginación, por ejemplo, en simples aleteos de mariposas de colores.