El camino de la libertad

Por Roberto Augusto

Cuando hemos abandonado la ambición de triunfar en la sociedad, cuando hemos dejado de repetir lo que otros piensan, de seguir dogmas sin sentido o de vivir aferrados a divisiones que nosotros mismos hemos creado, entonces estamos en el camino de la libertad. Los que sentimos una enorme pasión por la verdad sabemos que el precio que hay que pagar por ella vale la pena.

Ser pobre no tiene nada que ver con tener mucho o poco dinero. La mayor pobreza es ser un esclavo sin saberlo, vivir encadenado por la avaricia, por prejuicios, por dogmas y mentiras. La verdadera riqueza no es tener mucho, sino ser libre. Y ese es un camino que cada uno de nosotros debe recorrer en soledad. No hay ningún sistema filosófico, ni ideología ni religión que nos pueda dar esa libertad que todos deseamos.

Desde hace miles de años muchos pensadores han soñado con crear la sociedad perfecta. Han creído que el orden interior que nos falta puede ser impuesto por un sistema social determinado. No han entendido que la sociedad solo es la suma de las personas que la integran. Y que el mejor sistema social que teóricamente podamos diseñar fracasará en la práctica si no somos capaces de cambiar la esencia de las personas. Si somos corruptos degradaremos cualquier sociedad ideal que pretendamos crear. La verdadera revolución no es exterior, sino interior.

Si somos capaces de abandonar todas esas barreras mentales que nos han ido colocando desde niños en nuestra mente entonces seremos creativos, veremos el mundo con ojos nuevos. Dejaremos de mirar fuera y cambiaremos lo que hay dentro. Solo así podremos construir un mundo mejor para todos.

www.robertoaugustoblog.com
@raugusto33

Rays of light revealing a pathway.<br />(Los rayos de luz que revela un camino)<br />©Fotolia
Rays of light revealing a pathway.
(Los rayos de luz que revela un camino)
©Fotolia

Dejar un comentario

nombre*

Correo electrónico* (no publicado)

sitio web